Mantener a un perro bien inmunizado es algo esencial para asegurar su salud a lo largo de su vida, pero sobre todo, cobran gran relevancia en los primeros meses de vida, donde deben ir creando anticuerpos gracias a estas vacunaciones, para poder hacer frente a graves enfermedades que pueden incluso terminar con su vida en un corto periodo de tiempo.
Vacunar a un cachorro sin un calendario predeterminado por el veterinario, o realizar esta fase sin las precauciones adecuadas puede acarrear una deficiente resistencia a virus como el Parvovirus o el moquillo, esta última prácticamente erradicada en nuestro país y que ha vuelto a florecer en los últimos tiempos debido a la dejadez de las vacunaciones periódicas.
A continuación responderemos a unas preguntas imprescindibles a la hora de proceder a la vacunación de nuestros cachorros y que seguramente os servirá como guía.
¿Cuándo se debe poner la primera vacuna a un perro?
Los cachorros nacen con el sistema inmunológico inmaduro, por lo que es incapaz de proteger ante enfermedades. Por ello, es vital que tomen el calostro, el primer líquido que sale de las mamas de la perra y que contiene anticuerpos que los protegerán. Pero, los anticuerpos del calostro son limitados y vacunar a una edad muy temprana solo reduce la cantidad de anticuerpos que tiene el cachorro y no genera inmunidad porque el sistema inmunitario no es bastante maduro.
Es por este motivo que para que una vacuna realmente haga efecto es que el sistema de defensa del perro sea mínimamente maduro. Por lo tanto, es muy importante saber cuándo podemos poner la primera vacuna a un cachorro, esto será cuando se considere que ya tiene un sistema inmune suficientemente maduro. De hecho, el sistema inmunológico de los perros alcanza su plenitud sobre los cuatro meses pero antes ya ha llegado a un nivel que es apto para recibir las primeras vacunaciones.
Los cachorros no se vacunan a los pocos días de nacer, sino que se espera a que tengan al menos 45 días de vida. Aunque por el hecho de que mientras mamen siempre tendrán cierta inmunidad proveniente de la leche materna y su sistema se estará formando, a veces se espera hasta que estén destetados más o menos a la edad óptima de las 8 semanas de vida. Por ello, generalmente, la primera vacuna suele ponerse entre el mes y medio de vida y los dos meses, aunque debe decidirlo el veterinario.
Además, antes de la primera vacuna y hasta que haya hecho efecto es vital que no toque el suelo de la calle, ni tenga contacto con perros que no sean de nuestra casa o progenitores, pues es vulnerable a contagios.
Sobre los 20 días desde su nacimiento los cachorros iniciarán su alimentación con pienso, humedecido o pulverizado húmedo, lo que les irá fortaleciendo para afrontar la primera vacunación.
Vacunas obligatorias para perros y opcionales
Las imprescindibles son las que deben ponerse a todos los cachorros, ya que protegen contra enfermedades peligrosas y comunes en todo el mundo. Pero, las opcionales protegen contra enfermedades que inciden en determinadas regiones geográficas, ciertas condiciones de vida o épocas.
Las vacunas imprescindibles:
Moquillo canino
Hepatitis infecciosa
Parvovirus
Rabia canina
Las vacunas opcionales:
Leptospirosis
Parainfluenza canina
Tos de las perreras
Enfermedad de Lyme
Vacuna polivalente para perros
Además, existen las vacunas polivalentes son aquellas que en una sola inoculación inmunizan contra varias enfermedades. Es frecuente que se usen las que protegen contra tres, cuatro, cinco, seis y ocho patógenos:
Trivalente: moquillo, adenovirus 1 o 2 (es decir, hepatitis infecciosa y tos de las perreras) y la leptospirosis.
Tetravalente: contiene lo mismo que la trivalente y añade la parvovirosis canina.
Pentavalente: moquillo, adenovirus 1 y 2, parvovirus y parainfluenza.
Hexavalente: moquillo, adenovirus 1 y 2, 2 cepas de leptospirosis y parvovirus.
Octovalente: moquillo, adenovirus 1 y 2, 2 cepas de leptospirosis, parvovirus, parainfluenza y coronavirus.
También se incluyen el herpesvirus canino, babeosis o piroplasmosis y contra bordetella bronchiseptica y pasteurella multocida, las cuales son componentes bacterianos oportunistas en la tos de las perreras, además de la vacuna contra la leishmania. Actualmente, la vacuna contra la leptospirosis y la que es contra la Rabia suelen ser administras en una inoculación separada para conseguir mayor eficacia.
¿Cuál es el calendario de vacunas para perros en España?
- 6 semanas: Primovacunación o primera vacuna polivalente. No siempre se pone pues depende de la edad del destete.
- 8 semanas: Polivalente (adenovirus 1 y 2, moquillo, parainfluenza y parvovirus).
- 12 semanas: Recordatorio de la Polivalente Polivalente (adenovirus 1 y 2, moquillo, parainfluenza y parvovirus) y leptospirosis.
- 16 semanas: Rabia.
- Anualmente: Recordatorio de la Polivalente (adenovirus 1 y 2, moquillo, parainfluenza y parvovirus), leptospirosis y de la Rabia.
La antirrábica o inoculación contra la Rabia en España es obligatoria en la gran mayoría de comunidades, solo es voluntaria en Asturias, Galicia, el País Vasco y Cataluña.
El calendario propuesto es solamente una guía general y puede que cambie según la época o la región. Por ello, tu veterinario puede plantearte un calendario diferente de acuerdo con la situación de tu cachorro. De todos modos, este es un modelo de calendario estándar que puede servir como guía para lo más básico en cualquier otro país, ya que las vacunas imprescindibles comentadas en el apartado anterior son comunes en todo el mundo.
Efectos secundarios de las vacunas en los perros
Tanto si se trata de las primeras vacunas como si ya son revacunaciones anuales durante el resto de la vida del cachorro, es aconsejable que las vacunas se administren por la mañana. De esta manera, si hubiese cualquier reacción, aunque no son frecuentes, tenemos todo el día para poder observar y tratar esa reacción.
Algunos perros sufren de reacciones leves como letargo, un poco de fiebre y pérdida de apetito después de las vacunas. Otros presentan una pequeña hinchazón en el lugar de la inyección. Estos efectos duran poco tiempo y no representan ningún peligro para la salud.
En pocos casos se presentan reacciones anafilácticas que son reacciones alérgicas peligrosas, pues en estos casos los perros tienen vómitos, diarrea y dificultad para respirar y ocasionalmente pueden desmayarse. Las reacciones anafilácticas pueden ser fatales si no se tratan inmediatamente, pero cuando son tratadas a tiempo no suele haber riesgo de muerte. Afortunadamente las reacciones anafilácticas a las vacunas para perros son muy raras.
Como decíamos al principio, seguir una pauta en las vacunaciones es imprescindible para proteger a nuestros cachorros y perros adultos, por eso es necesario dejarlo en manos de profesionales como son los veterinarios de nuestra zona, que nos informarán correctamente de las vacunas necesarias y la legislación pertinente de nuestra comunidad.